El Sandbox Regulatorio Español es un paso importantísimo para que en Insurtech encontremos el entorno adecuado y la cultura de innovación necesaria para maximizar el éxito de los proyectos en nuestro país. Es un entorno seguro de pruebas creado para realizar ensayos controlados y delimitados de nuevos productos o servicios que aportan una innovación tecnológica aplicable en el sector financiero o asegurador.
Cuando por fin se aprobó la ley el 13 de Noviembre de 2020, Tuilli entró a formar parte en primera convocatoria en Mayo de 2021, para trabajar bajo el paraguas de la Direccion General de Seguros y Fondos de Pensiones.
Tuilli es una Insurtech intergeneracional y de productos modulares que utiliza tecnología Blockchain y Smart Contracts, además de un lenguaje transparente, para hacer cumplir las voluntades de las personas y gestionar de forma eficiente y automática las necesidades del asegurado y sus familiares.
Lecciones aprendidas
El acceso a la experiencia regulatoria que ofrece el sandbox, nos ha permitido reducir el tiempo y costo de llevar nuestra idea innovadora a la práctica. Hemos podido acelerar nuestra ruta al mercado reduciendo gastos en consultores reguladores externos, y el equipo de profesionales del que nos hemos rodeado durante las pruebas, ha sido una masterclass continúa en todos los ámbitos.
Como pequeña empresa, nuestro paso por el sandbox nos ha hecho desarrollar políticas internas y de procesos más rigurosos. El rápido ritmo de crecimiento al que nos hemos expuesto en una etapa tan inicial nos ha permitido iterar igual de rápido. Y este ritmo de trabajo nos ha permitido proporcionar más certeza a los posibles socios o inversores.
Ha sido fundamental conocer que en el seguro es importante presentarse al momento de la necesidad o surgida la necesidad. Y la experiencia debe ser impecable para fidelizar. En seguros, la fidelización es un foco importante para generar ingresos recurrentes.
El constante contacto con el regulador nos ha obligado a trabajar en un proceso de compra menos complejo y en un excelente nivel de usabilidad. Además de evaluar el riesgo de forma ágil y captar leads cualificados con mínimo desecho en el proceso de contratación.
Entender a los clientes ha sido fundamental, al mercado español y el producto específico que se trabaja. La adopción de soluciones digitales no solo viene de una buena solución digital en sí, sino de una adopción de todo el proyecto al contexto.
El sandbox nos ha abierto una ventana para evaluar el interés del mercado, la viabilidad comercial, nos ha posicionado con una reputación en el sector y nos ha permitido hacer previsiones realistas de crecimiento.
El trabajo continuo en las revisiones de nuestra tecnología y su resiliencia nos ha permitido garantizar los controles apropiados para minimizar los riesgos.
Hemos conseguido una visión mucho más amplia de nuestro encaje hacia el mercado. Las pruebas nos permiten ver ahora con más claridad cuáles pueden ser nuestros próximos pasos para poder seguir alimentando nuestra propuesta.
Hemos aprendido que el objetivo principal que perseguíamos en un inicio en sandbox no tiene por qué ser un camino único, y que los aprendizajes de estos meses nos llevan a un modelaje necesario de nuestro modelo de negocio antes de un lanzamiento amplio al mercado y una vez aprendidas las medidas de seguridad y salvaguarda necesarias para mitigar los riesgos en una implementación adecuada.
Hemos aprendido que demostrar un track récord en el mercado es importante para ir avanzando en consecuencia, y por lo tanto es importante dar pasos intermedios para un crecimiento sostenible que no pierda de vista nuestras metas y nuestros valores como empresa. Y esto también va muy acorde con nuestro enfoque global. El poder plantar unas bases sólidas que nos permitan la escalabilidad para hacer llegar los beneficios que proporciona nuestra solución a cuantos más lugares mejor. Y eso implica también el no aferrarse a únicamente un ramo en específico.
Nuestro progreso ha sido enriquecedor y consideramos un éxito nuestro paso por sandbox en la medida en la que hemos podido probar que nuestra tecnología es facilitadora y segura para el consumidor, y que podemos encontrar un camino menos pronunciado, tanto en recursos y tiempos, para proporcionar nuestra solución de aplicación de nuevas tecnologías para reducir los costes operativos de los procesos tradicionales y beneficiar al consumidor final.
También estamos muy orgullosos de formar parte ya de la historia de la primera cohorte del sandbox regulatorio español y haber podido contribuir, con nuestro granito de arena, en avanzar en la promoción de la competencia en el mercado e impulsar la innovación útil empujando al sector en general a mejorar la eficacia de los mercados. Y, por último, resaltar que hemos aprendido a innovar sin perder la necesaria emotividad de los servicios.
Valor añadido que ha demostrado el proyecto
Se ha puesto a conocimiento del supervisor un nuevo concepto de seguro en un sector tradicional y ha podido observar su digitalización de principio a fin. Además de un estudio de su uso y de los procesos que le familiariza con las tecnologías implementadas.
La DGSFP también ha podido obtener un mayor conocimiento de la digitalización del sector para, en su caso, proponer nuevas normativas que faciliten la automatización de procesos.
En cuanto a la tecnología, el Proyecto ha demostrado que el uso de la tecnología blockchain es eficaz para asegurar la inmutabilidad, trazabilidad y veracidad de los datos de asegurados, pólizas y coberturas, así como el uso de smart contracts para ejecutar de forma automatizada la prestación de los servicios contratados bajo las coberturas y garantías de la póliza.
Una tecnología que, sin lugar a duda, rompe las barreras geográficas y que puede internacionalizarse a lo largo de todo el panorama mundial sin excepción, incluso adaptarse a los diferentes ramos de seguros, a las generaciones más jóvenes, y a las poblaciones más desfavorecidas. Con adaptación a las necesidades o estilos de vida de los usuarios y sus familiares, y mejora en las condiciones de acceso y disponibilidad para las garantías.
Un producto que facilita la contratación para hacerla más segura y confiable, que reduce tiempo y costes y agiliza la prestación de servicios, en tiempo real y sin intermediarios.
Finalmente, el protocolo de comunicación con la Administración propuesto por el Proyecto para la obtención inmediata de los certificados es una oportunidad inmejorable para digitalizar y adaptar la normativa en cuanto a la solicitud y obtención de los trámites post mortem, algo que la sociedad y los profesionales de los sectores asegurador y funerario vienen requiriendo desde hace mucho tiempo.
Judith Giner Gandía – CEO y Fundadora de Mi Legado Digital. Vicepresidenta de la Asociación Española de Fintech e Insurtech y co-fundadora de la iniciativa Fintech Woman Network/Mentoring. Dedicada al sector asegurador y financiero durante más de una década, especialista en Informática de Empresas, emprendedora en TI. Top 10 Fintech Influencer 2018. Premio Mujer Emprendedora Insurtech 2019. Docente y conferenciante. Coautora del libro «Testamento ¿Digital?» y Libro Blanco Insurtech. Embajadora española de la Red de impacto Mujeres en Fintech #MEFtech. Socia en Bequest Digital Trust, S.L., y fundadora de Minfobio.org, DigitalFunerBox.com y TheNewNormalWear.com.